El Foro Latinoamericano de Ciencia Abierta, desarrollado del 11 al 13 de septiembre en la ciudad de Quito, fue un hito en la conformación de una comunidad de ciencia abierta en el Ecuador. Organizado por la Fundación Openlab Ecuador en colaboración con la oficina de UNESCO en Ecuador y la Universidad Andina Simón Bolívar, este evento reunió a más de 30 expositores y panelistas de 11 países, más de 150 asistentes, entre representantes de organizaciones públicas y de universidades ecuatorianas provenientes de diversas ciudades del país, así como de Chile y Colombia. Este foro forma parte de los esfuerzos enmarcados en el segundo Plan Acción de Gobierno Abierto y las políticas de ciencia abierta impulsadas en conjunto con SENESCYT y el Grupo Núcleo de Ciencia Abierta.
El foro contó además con el apoyo de importantes organizaciones. Entre los auspiciantes se destacaron la Open Research Funders Group, la Universidad Andina Simón Bolívar sede Ecuador, CEDIA, MetaDocencia y la Universidad UTE. En alianza con una serie de organizaciones que apoyan la ciencia abierta en Ecuador y la región, quienes desempeñaron un papel clave en el éxito del evento, consolidando un carácter colaborativo fundamental para el avance de la ciencia abierta.
El evento se destacó por su enfoque multidisciplinario y su variada programación. Entre las temáticas discutidas, resaltaron las publicaciones científicas, las revistas de acceso abierto y la diversidad editorial. La sesión inaugural puso sobre la mesa una reflexión crítica sobre los rankings e indicadores académicos, generando un debate en torno a los modelos de evaluación actuales que despertó un fuerte interés entre los asistentes. El público, compuesto por investigadores, editores y bibliotecarios, mostró gran alineación con los desafíos planteados, participando activamente en la discusión con preguntas y comentarios.
El foro no solo tuvo un impacto presencial, sino también virtual, con la participación online de más de diez países de América Latina. Los asistentes remotos siguieron atentamente las discusiones y ponencias a lo largo de los tres días, demostrando el creciente interés en la ciencia abierta a nivel regional. Además, durante el evento se realizaron laboratorios y talleres paralelos dirigidos por expertos de México, Brasil, Colombia y Chile. Estas actividades fueron recibidas con entusiasmo, ya que brindaron enfoques prácticos y herramientas útiles para fomentar la ciencia abierta en el país, una necesidad que los participantes consideraron crucial.
El segundo día del foro estuvo marcado por la discusión del derecho a la ciencia como un proceso participativo, vinculado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Las presentaciones de expertos de Costa Rica, Colombia y Ecuador aportaron valiosas experiencias sobre la creación de políticas públicas de ciencia abierta. Asimismo, se resaltó la importancia de la formación y capacitación, destacándose proyectos innovadores como el curso en formato Moodle de la Universidad de Antioquia, que ha sido premiado por su contribución al desarrollo de habilidades en docentes e investigadores.
El foro concluyó con debates sobre la gobernanza de datos, infraestructuras abiertas y la reproducibilidad en la ciencia. Se analizaron casos de éxito en América Latina, y se discutió el impacto de los pagos por publicar (APCs), revelando datos sorprendentes sobre el costo de la publicación científica en la región. Los asistentes reflexionaron sobre la necesidad de mejorar la transparencia y accesibilidad en la ciencia, objetivos que el foro logró dinamizar dentro de la comunidad ecuatoriana. En resumen, el Foro Latinoamericano de Ciencia Abierta consolidó su papel como espacio clave para promover la ciencia abierta, avanzar en la creación de políticas públicas y generar conciencia sobre los desafíos del sistema científico actual.
Finalmente, se anunció que la siguiente edición del Foro Latinoamericano de Ciencia Abierta se desarrollará en Costa Rica en el año 2026. Este país ha mostrado un compromiso continuo y relevante en el campo de la ciencia abierta, consolidando una comunidad activa y trabajando de manera sostenida en esta área. Costa Rica será el escenario ideal para continuar promoviendo el diálogo y la cooperación en torno a la ciencia abierta en la región.
